lunes, 12 de abril de 2010

Se recogen los frutos

TEXTO: Javier Fernández

A Banarte se le puede calificar de muchas maneras pero sobre todo son trabajadores y se entregan en lo que hacen. Esa es la sensación que queda tras haber visualizado la obra de "Vuelve, Bigotillo Vuelve" en el Teatro Campos Eliseos de Bilbao.

Realizaron el preestreno del espectáculo el 27 de marzo en la Casa de Cultura Errota de Matiena, jugaban en casa y gustó. Aquella actuación se utilizó como prueba para saber que aspectos eran en los que se tenía que hacer más hincpié antes del gran estreno en la capital vizcaína. Los actores se sintieron muy a gusto sobre el escenario que habían utilizado para sus ensayos, con un patio de butacas a rebosar y con un público riendo a carcajadas desde el primer sarcasmo.


Sin embargo, para ellos la prueba de fuego era el hecho de actuar en un teatro como el Campos Eliseos, algo con lo que solamente se soñaba cuando se fundó el grupo hace dos años y medio. Ahora aquel sueño era un hecho, y había que hacerlo bien. Acudirían gente importante del mundo de la farándula a ver el gran estreno, no se podía defraudar. Con esa función estaba en juego el seguir aspirando a más o quedarse como un grupo de amigos que hacen monólogos en los bares y de vez en cuando algún cortometraje. Había que demostrarlo sobre el escenario como los grandes artistas.

Representaron la obra dos días consecutivos, el 5 y 6 de abril, después de las vacaciones de Semana Santa. Quizás no fuesen las fechas más idóneas para que el público acudiera en masa al teatro porque la gente se ha gastado el dinero en los días de fiesta. Pero la buena publicidad que se realizó mediante numerosos medios de comunicación hicieron que el Campos Eliseos tuviera más de media entrada en ambos días.

Pocas horas antes del estreno se palpaba el nerviosismo en los actores y en el director, Gabi Reig, incluso en el escritor, David Barbero, que no se quiso perder el segundo paso de su obra. En el camerino estaban maquillando a los que saldrían sobre el escenario para retransmitir las risas a los que acudían con su entrada. Cuando todos estaban preparados una hora antes de la función se subieron sobre la palestra para realizar una breve representación, entre otras cosas para situarse en el escenario más grande que el de Errota, el de los ensayos.

Quince minutos antes de las ocho, todos se retiraron a los camerinos para que el público se situara en sus correspondientes asientos. La gente que acudía estaba entre entusiasmada y expectante porque no estaba segura de lo que iba a ver hasta que salieron los actores caracterizados y fueron iluminados por los focos. En ese momento ya se oyeron las primeras risas, risas que continuarían a lo largo de la hora y media de espectáculo.

En el patio de butacas se oían comentarios cuando alguno de los personajes decía algo que sorprendiera a los espectadores, como cuando sor Auxilio sale entre las cortinas y dirigiéndose al público pregunta "¿Saben en que se diferencian la becaria de Clinton con la de Bush? En que la de Bush lleva bigote". Y que decir de los bailes de Fraga o el inglés de de Aznar. Los actores no dejaron de sorprender al respetado en ningún momento. Al abandonar el teatro el público se marchó comentando lo que acaba de ver y lo más importante, con una sonrisa en el rostro.

PRÓXIMA ACTUACIÓN: el día 13 de mayo en Plateuena Kafe Antzokia de Durango a las 22:00 h.

* Puedes escuchar el programa de radio especial sobre la obra de "Vuelve, Bigotillo Vuelve" con entrevistas al director y al guionista en: www.radio.banarte.net